Tengo toda la noche en las venas – Paul Eluard

45 Angelerías




Imploro al ángel de la muerte
Imploro al ángel de la guarda
Al angelito negro
y al ángel patudo imploro
Imploro al ángel de las tinieblas
Y hasta el ángel del mar
que es un pez gordo,
imploro.
Al ángel bueno
Al que tiene ángel
A los tronos y a los serafines imploro
¿Y por qué no decirlo?
También a los querubines
a las virtudes y potestades.
Imploro a los ángeles
y a los arcángeles
propiamente tales
y por si acaso al Ángel Parra
y a la Angélica María,
Podría implorar a la Santa Madre
pero me mandaría por callampas.
Y al Santo Padre que vive en Roma
podría implorar de rodillas.
Pero no abusemos
déjenme implorar solito
a toda la corte celestial
que me ayuden a terminar
este versito
que mi musa se fue de vacaciones.